miércoles, 10 de septiembre de 2008

Poned bien altas esas banderas,
y que no os importe su altura;
Doce siglos ha, el Campo de Sangonera
testigo fue de una batalla muy dura,
aquellos Listari, Barbate y Tebar,
fecha heroica dejaron esculpida.
¡Cuántas como ésta, que fueron,
orgullo de nuestra Patria,
entre el polvo de los siglos,
se encontrarán sepultados...!
El Licenciado Cascales, Cronista,
descubrió esta hermosa página,
con que la historia de Murcia,
de heroismo se engalana.
Hecho memorable aquel
y de tan grande trascendencia,
de aquellos héroes y heroinas,
que por ser valientes de veras,
defendieron con sus vidas,
de Murcia la independencia,
para que ningun invasor
pusiera sus plantas en ella.
Gran hazaña de murcianos aguerridos,
que pasaron a la historia verdadera;
como siglos antes hicieron los numantinos,
llamándose el lugar desde entonces: Sangonera.
Viniendo de nuestra Murcia,
por la Carretera de El Palmar,
rueda el coche con su lenta marcha,
entre un trepidar de adoquines,
y el jadear de su máquina
¡Nene, debe faltar poco!
¡Josefa, muy poco nos falta!
Bello despertar de aquel día,
¡alegría de la mañana!
El coche ha dejado atrás,
la Iglesia y la Calle de Lorca,
las palmeras de El Palmar,
¡casas! ¡casas blancas!
que rodean el Teatro Bernal.
El Cruce de la Menua, carros, tartanas,
entre gigantescos baches, vienen y van,
¡oliveras! ¡muchas oliveras!
Las Casillas, el Campusino y el Muertes,
de las parras verdes doseles;
y chumberas ¡Muchas chumberas!
Al contemplar visión tan maravillosa,
el viejo coche detiene su marcha,
otra vez agua al motor, se descansa;
¡Zagales! ¿Quereis ramicos de flores?
¿Quereis un vasico de agua?
¡Paquita! ¡Pepito! ¡Angelin! ¡Paquico!
Dulce e inefable caricia,
¡cariñosa habla murciana!
¡Ya estamos en Sangonera, mamá!
¡Sangonera! ¡Sangonera de mi alma!
¡Papá Chico! ¡Papá Chico! ¿dónde está mi Lala?
Se fue a la Pizorra, con el cántaro a traer agua,
con la Isidra, la Carmen, el Paulino y la Encarna.

AL PATIÑERO

¡Qué encanto tienen tus trovos,
de factura recia y clara,
cuando copian el paisaje,
de nuestra Murcia encantada;
cuando hablan de los quereles,
de la moza desgraciada,
que espera junto a la cieca,
que llegue la ansiada carta;
del mozo que no vuelve,
porque se quedó en lontananza!

¡Qué encanto tienen tus trovos,
cuando pintan la frescura,
rezumante de la jarra;
el silencio acogedor,
de la murciana barraca;
la alegría del desperfollo,
el sonar de las guitarras,
los canticos de nuestros villancicos,
y con el Cardoso de parranda!

Tú puliste la frase tosca,
dándole salero y salsa;
la despojaste de torpezas,
de intención y de palabra,
y le añadiste tu ironía,
y tu gramática parda.

Murcia entera te admira, Patiñero,
porque eres la enciclopedia de nuestra raza,
¿Puede alcanzar un trovero
más nobles lauros y palmas?
Tus versos nunca tuvieron dobleces
ni aún, si como me dicen, cumples
novecientos y pico meses.

¡Felicidades!

lunes, 8 de septiembre de 2008

A LA MEMORIA DE MARIA BAÑOS

¡ Silencio los palmareños!
que enmudezcan las guitarras,
quédense las bailaoras,
convertidas en estatuas...
Y..suenen las castañuelas,
como cajas destempladas,
para acompañar el luto;
que ha muerto Mari Baños,
nuestra Presidenta amada..

Cuesta trabajo creerlo...
Ella, que cinceló el nombre de Murcia,
por pueblos y lares de España,
al ritmo y grácia de baile,
con su Peña El Lugarico del alma,
la más murciana de todas,
la de las parrandas y malagueñas,
allende Galicia y Cantabria.

Cuesta trabajo creerlo...
¡ Y es verdad tanta desgrácia!
Apagaron sus ojos,
unas violetas moradas,
y la sonrisa no enciende,
el resplandor de su cara.

Están quietos para siempre,
sus píes que fueron dos alas;
sus manos, par de palomas,
en ardoroso vuelo desbocadas.
¡ Núnca sonarán postizas,
con ecos de madrugada!

Quiero consagrar, amiga,
un romance a tu recuerdo,
deuda que tengo contigo,
seguro que desde el cielo,
¿en dónde podrías estar?
vendrás, Mari, a leerlo.

Tu memoria en los palmareños,
perdurará mucho tiempo,
porque tenías un tesoro ,
en tu corazón ingenuo,
de bondad y simpatía,
de amistad franca y sin velos.

No te conocí enemigos,
¿ cómo podrías tenerlos?
pues a todo el que tratabas,
lo conquistaba tu afecto.

¿ Recuerdas aquellos viajes,
con mi mujer y tu hermana,
que con muy leve esperanza,
pero en entrañable tertulia,
hicimos a la capital de España?

Siempre en lucha por la vida,
mas siempre alegre y risueña,
consuelo querías darnos,
siendo tuya la enfermedad,
el sufrimiento y la pena.

¡ Lugarico ! ¡ Lugarico !
has perdido la batalla,
¿dónde tú sin horizonte?
¿dónde sin tu Lirio de Alhama?
que ella ya no responde,
que se fué para siempre,
y las puertas del Cielo,
en oro esculpieron su nombre.

¡ Vamos Mari! Es la hora...
tu Virgen del Rosario espera,
con su túnica bordada;
cántale canciones bellas,
mientras dura la alborada.

¡Campanas! ¡ Doblad Campanas !
¡ Mari ! mira cuanta gente asoma,
no es un duelo, no te preocupes,
ponte este refajo azul de cielo...
¿ Que quieres descansar? Pero..si no puede ser..

Anda, no escuches las voces,
Yo soy el fin de tu drama.
Pero ¿ No me reconoces ?
¡ Soy tu pueblo!
¡ Soy El Palmar que te llama !

viernes, 5 de septiembre de 2008

LA INSPIRACION POETICA

¿Dónde vas tú poeta sin horizonte
buscando ansioso a quien de ti se esconde?
Busco y hallo de mi inspiración el vacio,
mi corazón atisba su sombra tenue;
añora aquellas íntimas tardes de estío,
tú tan cerca, tan encendida y tan breve...

Entonces me sentí Luna y Sol en su explendor,
estudié autores de aquella Murcia anterior,
de cuyos sueños y obras fuí admirador;
emulé su prosa, de su estilo elegí lo mejor,
bellos versos nacían espontáneos en mi interior,
tenía la palabra y el alma siempre en la boca,
y la pluma en mi mano era cual clavel y rosa;
de mi tierra abordé su más grande etapa histórica,
de poetas del Casino de Murcia fuí presentador,
en pueblos de Murcia elegido fuí para dar el pregón,
requerían mi presencia los medios de información,
y al más grande trovero murciano dediqué bella canción;
Fué entonces mi más grande y sincera ilusión,
brindar a mis dos pueblos y a la Murcia de mi corazón,
los más hermosos y ricos frutos de mi poética inspiración.

Sensible, romántico,locuaz y apasionado,
sobre mí se posaba un mar de sueños,
en frondosos bosques me interné soñador,
encontré mi musa,se adentró en mi corazón,
reposé en sus senos, acaricié su piel,
a azúcares de fresa me supo y a dulce miel.

Ella me trajo el verso perfecto,
mimosa me lo mostró en el aroma de las flores,
en el dulce vuelo de variopintas mariposas,
en el inmenso resplandor de las estrellas.

Ella resucitó en mí recuerdos,
bajo los rayos solares;
pisando las hojas secas,
que de los árboles caen,
las hojas secas de Bécquer,
que se quejan al quebrarse,
las hojas secas que lloran,
y el viento arrastra y deshace...

¿Dónde estará ahora ella,
la de mis días estelares,
la que tenía ojos de fuego,
bajo el pelo de azabache?
Aquellos días embusteros,
tan huidizos, tan fugaces...

Hoy, mi vieja pluma olvidada,
por la humana ingratitud,
en su negra tinta yace enterrada,
junto a mi lejana juventud.
Sola, sin musa y abandonada,
en triste y nostálgica decadencia,
mi inspiración atormentada,
vomita versos sin elocuencia.

Pluma de mis abuelos,
estrofas de amores y celos,
tardes plenas de anhelos,
novias, fútbol y desvelos,
Padres, hermanos..¡ Todo cuanto quería !
entrañables fechas de hogar y familia;
como de campanas siento el eco de aquellos días,
lejanos ya en la distancia, sólo recuerdo queda en mi vida.

Pensé que la belleza de mis versos era cosa eterna,
que en su luz interior siempre prendería la llama;
perdido el ingenio, no he sabido encenderla,
hoy sólo me queda de poeta, el alma.